I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 10

1 En el año ciento y sesentaAlexandro hijo de Antiocho que ſe dezia el Illustre, subió, y occupó à Ptolemay da, y recibieronlo, y reynó alli.

2 Y oyendolo el rey Demetrio, juntó vn muy grande exercito, y ſaliole àl encuentro en batalla.

3 Y embió letras à Ionathas cõ palabras pacificas ensalçandolo:

4 Porque el dezia, Adelãtemosnos à hazer paz con el, antes que el la haga cõ Alexandro contra noſotros.

5 Porque el tẽdrá memoria de todos los males que hezimos contra el, y contra ſu hermano, y contra ſu nacion.

6 Y diole potestad de juntar exercito, y de hazer armas, y de ſer ſu confederado: y ansimismo mandó que los rehenes que estauã en la fortaleza, le fueſſen entregados.

7 Y vino Ionathas en Ieruſalem, y leyó las cartas à oydos de todo el pueblo, y de los que eſtauan en la fortaleza.

8 Los quales vuieron gran temor, oyendo que el rey le daua potestad de juntar eexcito:

9 Y entregaron à Ionathas los rehenes, y el los entregó à ſus padres.

10 Y Ionathas hizo ſu morada en Ieruſalem, y començó à edificar y à restaurar la ciudad.

11 Y mandó à los oficiales que edificaſſen los muros, y el monte de Sion alderredor de piedras quadradas, para fortificarlo, y hizieronlo anſi:

12 Y los estrangeros, que eſtauan en las fuerças que Bacchides auia edificado, huyeron:

13 Y cadaqual desamparó ſu lugar, y ſe fué à ſu tierra.

14 Solamente quedaron en Beth-suran algunos de los que auian dexado la Ley, y los mandamientos: porque, alli tenian ſu acogida.

15 Y el rey Alexandro oyó las promeſſas que Demetrio auia hecho à Ionathas: y auiendole sido cõtadas las guerras, y las valentias, que el y ſus hermanos auiã hecho, y los trabajos que auian paſſado.

16 Dixo, Hallaremos por ventura otro tal hombre? Aora pues hagamoslo nuestro amigo y confederado.

17 Y escriuiole vna letra, y embiole à dezir estas palabras.

18 El rey Alexandro à ſu hermano Ionathas, salud.

19 Auemos oydo de ti, que eres hombre poderoso en fuerças, y que eres conueniẽte para ſer nuestro amigo:

20 Aora portãto hazemos te oy summo Sacerdote de tu naciõ, yque seas llamado amigo del rey, (y embióle purpura y vna corona de oro), paraque consientas con noſotros en nuestras coſas, y nos guardes el amistad.

21 Y vistiose Ionathas la sancta vestidura en el septimo mes en el año ciento y sesenta en el dia solemne de los Tabernaculos: y juntó exercito, y hizo muchas armas.

22 Y oyẽdo Demetrio estos negocios entristeciose en gran manera, y dixo.

23 Que es eſto que auemos hecho, que Alexãdro nos hà tomado la delãtera à tomar el amistad de los Iudios para fortalecerse?

24 Yo tambien les quiero esscreuir palabras de exhortacion, y de dignidades, y de dones, porque ſean conmigo en ayuda.

25 Y escriuioles por estas palabras: El rey Demetrio à la gente de los Iudios, salud.

26 Oydohemos que nos aueys guardado la confederaciõ, y que aueys quedado en nueſtra amistad, y que no os aueys allegado à nuestros enemigos: y hemosnos alegrado.

27 Aora pues perseuerad aun en conseruar cõ noſotros la fe, y pagaroshemos biẽ por loque aueys hecho con noſotros:

28 Y soltaroshemosmuchos prestamos, y hazeroshemos muchas mercedes:

29 Y por aora yo os hago libres, à vosotros, y à todos los Iudios, de tributos: y os suelto las pensiones de la sal, y las coronas, y las tercias de lo sembrado.

30 Y ansimismo yo os dexo desde el dia de oy en adelante la mitad de la renta de la leña, que es de mi parte, que nunca mas ſe tome de la tierra de Iuda, ni de los tresgouernamientos que le ſon adjuntos, de Samaria y de Galilea desde el dia de oy para siempre.

31 Y que Ieruſalem ſea sancta y libre con todos ſus terminos, y que los diezmos y los tributos ſean deella.

32 Tãbien yo suelto la potestad de la fo taleza, que eſta en Ieruſalem, y la doy àl summo Sacerdote, paraque ponga en ella quales quiera hombres, que el escogiere, que la guarden.

33 Y à toda perſona de los Iudios que de la tierra de Iuda estuuiere captiua en todo mi reyno, yo la dexo libre de gracia: y que todos ſean libres de tributos aun de ſus ganados.

34 Y que todos los dias festiuos, y los sabados, y las nueuas lunas, y los dias señalados, y los tres dias antes del dia solemne, y los tres deſpues, ſean todos dias de immunidad y de remissiõ à todos los Iudios, que eſtan en mi reyno.

35 Y que ninguno tenga potestad de les hazer algo, ni de moleſtar à ninguno deellos en ningun negocio.

36 Y que de los Iudios puedã ſer escriptos en el exercito del rey haſta treynta mil hombres, à los quales les ſea dado el sueldo, que es señalado à todos los soldados del rey: y que de ellos puedan ſer ordenados para ſer puestos por las grandes guarniciones del rey.

37 Y que de estos ſean constituydos en los negocios reales, que ſe hazen por cõmission: y que los tribunos y capitanes de estos ſean señalados de ellos mismos, y que biuã en ſus leyes, como lo hà ordenado el rey en la tierra de Iuda.

38 Y que los tres gouernamientos que ſon adjuntos à Iudea de la prouincia de Samaria, ſean juntos con Iudea, paraque estẽ de baxo de vno, y no obedezcan à estraña potestad, ſi no à la del summo Sacerdote.

39 A Ptolemayda y ſus terminos, doy en don à los sanctos, que eſtan en Ieruſalem, para los gastos que conciernen àl Templo.

40 Y yo doy cada vn año quinze mil siclos de plata de las cuentas del rey, de los lugares que me pertenecen.

41 Y que todo loque resta, que no auian pagado los que teniã los negocios del rey los años paſſados, que eſto ſea dado parala obra del Templo.

42 Y de mas de eſto, cinco mil siclos de plata, que ſe tomauan de la renta del Sanctuario todos los años, que eſto pertenezca à los Sacerdotes, que eſtan en el ministerio.

43 Y que todos los que fueren obligados àl rey en qualquier negocio, y ſe acogieren àl Templo que eſtá en Ieruſalem y por todos ſus terminos, ſean libres ellos y todo loque tuuieren en mi reyno.

44 Y que para edificar y restaurar las obras del Templo, los gastos ſe den de las cuentas del rey.

45 Y que para edificar y fortificar los muros àl derredor de Ieruſalem, los gastos seã dados de las cuentas del rey, y anſi mismo para edificar muros en toda Iudea.

46 Como Ionathas y el pueblo oyeron estas palabras, no les dieron credito, ni las recibieron.porque seacordaron del grande mal que el auia hecho en Iſrael, y que los auia atribulado en gran manera.

47 Y plugoles mas Alexandro, porquãto el primero auia tratado con ellos de los negocios de la paz, y anſi todo el tiempo le dieron ayuda.

48 Y juntó el rey Alexandro gran exercito, y acercó el campo contra Demetrio.

49 Y los dos reyes ſe dieron la batalla, y huyó el exercito de Demetrio: y siguiolo Alexãdro, y vuo la victoria ſobre ellos.

50 Y creció la peleahasta puesta del sol, y aquel dia fué muerto Demetrio.

51 Y embio Alexandro à Ptolomeo rey de Egypto mensageros diziendo anſi:

52 Porquanto yo he tornado en mi reyno, y me he aſſentado en la silla de mis padres, y he alcançado el Señorio, y he deshecho à Demetrio, y he posseydo nueſtra prouincia.

53 Porque auiendo auido batalla con el, y ſiendo el y ſu campo deshecho de noſotros, estamos aſſentados en la silla de ſu reyno.

54 Hagamos pues aora amistad entre noſotros, y dame tu hija por muger, y yo seré tu yerno, y te daré dones y à ella coſas conuenientes à tu dignidad.

55 Y el rey Ptolemeo respondió diziendo, Dichoso ſea el dia enque boluiste à la tierra de tus padres, y te aſſentaste en la silla de ſu reyno.

56 Yo pues haré aora contigo loque escreuiste: mas salme tu à recebir à Ptolemayda para que nos veamos el vno àl otro, y que yo ſea tu suegro como dixiste.

57 Y ſalió Ptolemeo de Fgypto, el y ſu hija Cleopatra, y vino à Ptolemayda en el año ciento y dos.

58 Y el rey Alexandro lo ſalió à recebir, y el le dió à ſu hija Cleopatra, y hizo ſus bodas en Ptolemayda con grande pompa como reyes.

59 Y el rey Alexandro escriuió à Ionathas que lo ſalieſſe à recebir.

60 Elqual ſe partió con pompa à Ptolemayda, y ſalió alli àl encuentro de los dos reyes, à los quales dió mucha plata y oro y presentes, y halló gracia delãte de ellos.

61 Y jũtaronſe cõtra elalgunoshombres pestilenciales de Iſrael, malos hõbres, que ſe quexaron del: mas el rey no los escuchó.

62 Antes mandó desnudar à Ionathas de ſus vestiduras, y ſer veſtido de purpura, y fue hecho anſi. Y el rey lo hizo sentar con sigo.

63 Y dixo à ſus principes, Salid con el en medio de la ciudad, y hazed pregonar, que ninguno dé quexa del ſobre ningun negocio, ni le ſea moleſto por ninguna razon.

64 Y aconteció, que como ſus acusadores vieron pregonar ſu hõrra, y à el cubierto de purpura, todos huyeron.

65 Y el rey lo ensalçó, y lo hizo escreuir entre ſus primeros amigos, y lo hizo capitan y como participe del principado.

66 Y Ionathas ſe tornó en Ieruſalem cõ paz y alegria.

67 En el año ciẽto y sesenta y cinco Demetrio hijo de Demetrio vino de Creta à la tierra de ſus padres.

68 Loqual oyendo el rey Alexandro, fue muy triste, y tornose à Antiochia.

69 Y el rey Demetrio puso por capitan à Appolonio, el qual era gouernador de Celesyria, y juntò grande exercito, y puso el campo à Iamnia, y embió à dezir à Ionathas summo Sacerdote.

70 Tu solo de todos nos reſiſtes, y yo ſoy escarnecido y auergonçado por cauſa tuya: porque tu essecutas poder contra noſotros en los montes.

71 Aora pues ſi tu confias en tus fuerças, deciende à noſotros en el campo, y determinemosnos alli, porque conmigo eſta la fuerça de las ciudades.

72 Pregunta y aprende quien ſoy yo, y los de mas que me ayudan, y dezirtehán, que no podreys vosotros parar en nueſtra preſencia: porque tus padres dos vezes han sido puestos en huyda en ſu misma tierra.

73 Y como podras aora sufrir la caualleria y tan grande exercito en el campo, dõde no ay roca ni peñasco ni lugar à donde huyr?

74 Como Ionathas oyó estas palabras de Appolonio, ſu animo ſe commouió, y eſcogió diez mil hombres, y ſalió de Ieruſalem, y ſu hermano Simon le ſalió àl encuentro en ayuda.

75 Y acercó el campo à Ioppe, y cerraronle las puertas de la ciudad, porque auia dentro guarnicion de Appolonio, y combatiola.

76 Mas espantados losque eſtauan en la ciudad, le abrierõ, y Ionathas tomó à Ioppe.

77 Y oyolo Appolonio, y tomó tres mil de cauallo, y grande exercito.

78 Y partiose à Azoto como que yua camino, y ſalió luego àl campo, porque tenia gran caualleria, y confiaua en ella: y Ionathas lo siguió camino de Azoto, y dieronſe batalla.

79 Mas Appolonio auia dexado en el cápo à las espaldas mil cauallos secretamente.

80 Y entendió Ionathas que auia emboscada à las espaldas, los quales cercaron ſu campo, y arronjarõ dardos en la multitud desde la mañana haſta la tarde.

81 Mas el pueblo estuuo firme, como Ionathas lo auia mandado, hastaque les cansó los cauallos.

82 Entonces Simon sacó ſu exercito, y acometió àl escuadron, porque la caualleria eſtaua cãsada, el qual fue deshecho por el, y pueſto en huyda.

83 Y la caualleria fue esparzida por el cãpo, y huyeron à Azoto, y entraronſe en el templo de Dagon ſu idolo, para saluarſe allá.

84 Y Ionathas puso fuego à Azoto, y à las ciudades que eſtauan en ſu alderredor, y tomó ſus despojos; y àl tẽplo de Dagon, y à todos losque auian huydo à el, quemó à fuego.

85 Y losque cayeron à cuchillo con losque fueron quemados fueron haſta ocho mil hombres.

86 Y Ionathas mouió de alli el campo, y aſſentolo ſobre Ascalon: y ſalieronle à recebir de la ciudad con grande pompa:

87 Y tornose à Ieruſalem con los suyos, los quales truxeron muchos despojos.

88 Y como el rey Alexandro oyó estos negocios, tornó à ensalçar mas à Ionathas en gloria.

89 Y embiole vn cinto de oro, como era costumbre de darſe à los pariẽtes de los reyes, y diole à Accaron y à todos ſus terminos en poſſeſsion.

I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 11

1 YEl rey de Egypto juntó vn exercito innumerable como el arena que eſtá à la orilla dela mar, y muchas naues: y procuró de tomar por engaño el reyno de Alexandro, y juntarlo àl suyo.

2 Y ſalió en Syria con palabras de paz: y losque eſtauan en las ciudades le abrian las puertas, y lo ſalian à recebir, porque el rey Alexandro auia mandado que lo ſalieſſen à recebir, por ſer ſu suegro.

3 MasPtolemeo en entrando en las ciudades, ponia guarniciones de soldados en cada vna de ellas.

4 Y como llegó à Azoto, mostraronle el templo de Dagon quemado, y à Azoto y ſus villas destruydo, y los cuerpos de los caydos en la batalla tendidos, porque los auian pueſto en mõtones junto àl camino.

5 Y contauan àl rey, como Ionathas auia hecho aquello, para deſpertar odio contra el: y el rey callaua.

6 Y Ionathas ſalió à recebir àl rey en Ioppe con grande pompa, y saludaronſe el vno àl otro, y tuuieron alli la noche.

7 Y Ionathas acompañó àl rey haſta el rio que ſe llama Eleuthero, y tornose à Ieruſalẽ.

8 Mas el rey Ptolemeo tomó el ſeñorio delas ciudades haſta Seleucia que es junto à la mar, y pensaua malos consejos contra Alexandro.

9 Y embió mensageros à Demetrio diziendo, Ven y hagamos entre noſotros cõ federacion, y yo te daré à mi hija la que tiene Alexandro, y reynarás enel reyno de tu padre.

10 Porque yo estoy arrepentido de auer le dado mi hija, porque el ha procurado matarme.

11 De eſta manera lo infamaua, porque cobdiciaua auer ſu reyno.

12 Y quitole ſu hija, y diola à Demetrio, y hizose estraño de Alexandro, y ſus enemistades fueron descubiertas.

13 Y Ptolemeo entró en Antiochia, y puso dos coronas ſobre ſu cabeça, de Egypto y de Aſia.

14 El rey Alexandro eſtaua en Cilicia en aquel tiempo, porque los moradores de aquellos lugares ſe auian rebelado.

15 Y oyendolo Alexandro, vino contra el en batalla, y el rey Ptolemeo sacó el exercito, y vinole àl encuẽtro con gran poder, y deshizolo.

16 Y Alexandro huyó en Arabia para ſer alli amparado, y el rey Ptolemeo fue ensalçado de eſta manera.

17 Mas Zabdiel Arabe cortó la cabeça à Alexandro, y embiola à Ptolemeo.

18 Y el rey Ptolemeo murió àl tercero dia, y los que eſtauan en las guarniciones perecierõ matandoſe los vnos à los otros.

19 Ansi Demetrio succedió en el reyno el año ciento y sesenta y ſiete.

20 En aquellos tiempos Ionathas juntò losque auia en Iudea para combatir la fortaleza que eſtaua en Ieruſalem, y hizieron contra ella muchos ingenios.

21 Y algunos que tenian odio à ſu naciõ, malos hombres, fuerõſe àl rey Demetrio, y dieronle auiso como Ionathas tenia cercada la fortaleza.

22 Y el, o y endolo, enojôse, y vino luego à Ptolemayda y escriuió à Ionathas que dexaſſe el cerco de la fortaleza, y que vinieſſe à encontrarſe con el à Ptolemayda de pres to, à hablarſe.

23 Loqual oyendo Ionathas, mandó que ſe persistieſſe en el cerco, y escogiendo algunos de los Ancianos de Iſrael y de los Sacerdotes pusose àl peligro.

24 Y tomando oro y plata, y veſtidos, y otros muchos presentes, partiose para Pto lemayda ál rey, y halló gracia delante del.

25 Y algunos malos de ſu naciõ pusierõ accusaciones contra el.

26 Mas el rey lo trató como lo auian tratado losque fueron antes del, y lo ensalçó en preſencia de todos ſus amigos.

27 Y confirmole el principado del Sacerdocio, y todas las dignidades que antes te nia: y hizolo de los principales de ſus amigos.

28 Y pidió Ionathas àl rey que hizieſſe franca de tributos à Iudea, y à las tres señorias, y à Samaria, y à ſus terminos, yprometiole trezìentos talentos.

29 Y el rey consintió en ello, y escriuió à Ionathas letras de todas estas coſas, en que ſe contenia de eſta manera:

30 El rey Demetrio à Ionathas ſu hermano, y à la gente de los Iudios, salud.

31 La copia de la letra que escriuimos à Lasthenes nuestro padre acerca de vosotros, os escriuimos tambien à vosotros para que lo sepays.

32 El rey Demetrio à Lasthenes ſu padre salud.

33 A la nacion de los Iudios, que nos ſon amigos: los quales guardan las leyes concertadas con noſotros, auemos determinado de hazer beneficios, por ſu buena voluntad que con noſotros tienen.

34 Portanto les confirmamos los terminos de Iudea, las tres señorias Apherema, Lydda, y Ramatha, que de Samaria ſon adjuntas à Iudea con todo loque les pertenece, que ſean assignadas para todos losque sacrifican en Ieruſalem, es asaber, loque el rey recebia antes de estas prouincias todos los años anſi de los frutos de la tierra como de los frutos de los arboles.

35 Y ansimismo todo lo de mas que nos pertenecia anſi de diezmos como de tribu tos deuidos à nos, y las ſalinas, y las coronas que ſe nos pagauã: les soltamos desde aora.

36 Todo ſe lo concedemos, y desde aora en todo tiempo ninguna coſa de estas ſerá quebrantada.

37 Procurad pues aora que ſe haga vn traslado de eſto, el qual ſe dé á Ionathas, y ſea pueſto en el monte Sancto en lugar eminente.

38 Viendo pues Demetrio que la tierra eſtaua quieta delante del, y que nada le reſiſtia, deshizo todo ſu exercito, embiando acada vno à ſu caſa, excepto el exercito de los estrangeros, que auia traydo de las yslas de las Gentes: por lo qual todos los de ſu exercito que auia recebido de ſu padre, tomaron odio con el.

39 Auia entonces vn Triphon, que auia sido primero dela parte de Alexandro, el qual viendo que todo el exercito murmuraua contra Demetrio, fueſe à Emalchuel Arabe, el qual criaua à Antiocho hijo de Alexandro:

40 Y incitóle à que ſe lo entregaſſe, para que reynaſſe en lugar de ſu padre: y juntamente le contó todo lo que Demetrio auia hecho, y el odio que los soldados le tenian, y estuuo allá muchos dias.

41 Entretanto Ionathas escriuió àl rey Demetrio, que echaſſe de la fortaleza de Ieruſalem los que la tenian, y los que eſtauan en guarniciones, porquanto moleſtauan à Iſrael con guerra.

42 Y Demetrio embió à dezir à Ionathas, No solamente haré eſto por ti y por tu nacion, mas aun à ti y à tu naciõ os ennobleceré con gloria, quando fuere ſu tiempo.

43 Mas àl presente harás bien, ſi me embiâres hombres que me ayuden; porque todo mi exercito ſe me haydo.

44 Entonces Ionathas le embió à Antiochia tres mil hombres valientes, los quales vinieron àl rey, y el ſe alegró de ſu venida.

45 Y de los de la ciudad ſe juntaron ciẽto y veynte mil hombres en medio de ella queriendo matar al rey:

46 Mas el rey huyó àl palacio, y los de la ciudad tomaron las calles y començaron à combatir.

47 Y el rey llamó à los Iudios en ayuda, los quales juntãdoſe à el todos, derramaronſe todos por la ciudad:

48 Y matarõ en aquel dia cien mil hombres, y puſieron fuego à la ciudad, y tomaron aquel dia muchos despojos, y libraron àl rey.

49 Y viendo los ciudadanos que los Iudios ſe apoderauan de la ciudad, como querian, desmayaron, y clamaron àl rey con ruego.

50 Diziẽdo, Danos las diestras para que los Iudios ceſſen de combatirnos à noſotros, y à nueſtra ciudad.

51 Y juntamente echaron las armas, y hizose la paz: y los Iudios alcançaron gloria delãte del rey, y de todos los que eſtauan en ſu reyno, y fueron nombrados en el reyno: y tornaronſe à Ieruſalem con muchos despojos.

52 Y Demetrio ſe aſſentó en el throno de ſu reyno, y la tierra reposó delante del.

53 Y desmintió todo lo que auia dicho, y hizose estraño de Ionathas, y no le pagó conforme à los beneficios que el le auia hecho, antes lo moleſtaua en gran manera.

54 Y deſpues de eſto boluió Triphon cõ Antiocho moço mochacho, el qual reynò, y ſe puso corona.

55 Y todos los exercitos que Demetrio auia esparzido, ſe juntaron à el, y pelearon cõtra Demetrio, el qual huyó, y boluió las espaldas.

56 Y Triphon tomólas beſtias, y occupó à Antiochia.

57 Entonces el moço Antiocho escriuió à Ionathas, diziẽdo, Yo te confirmo el Sacerdocio, y te constituyo ſobre los quatro gouernamientos, para que seas de los amigos del rey.

58 Y embiole vaſos de oro para seruicio: y diole facultad de beuer en oro, y de vestir purpura, y de tener cinto de oro.

59 Y à Simon ſu hermano hizo gouernador desde los terminos de Tyro haſta los de Egypto.

60 Y ſalió Ionathas, y anduuo las cuidades de la otra parte del rio, y juntose à el todo el exerciro de Syria en ayuda: y vino à Ascalon, y ſalieronle à recebir de la ciudad honradamente.

61 Y de alli ſe partió à Gaza, y los que eſtauan en Gaza ſe encerraron; y el lacercò, y quemó todo lo que eſtaua alderredor de la ciudad, y saqueola.

62 Y los de Gaza rogaron à Ionathas, y elles dió la diestra; y tomó los hijos de los principales en rehenes, y embiolos à Ieruſalem; y andùuo por toda la region haſta Damasco.

63 Y oyendo Ionathas que los principes de Demetrio ſe auian leuantado contra el en Cadès, que es en Galilea, con grande exercito, queriẽdo quitarle de la prouincia.

64 Salioles àl encuentro, dexando à Simon ſu hermano en la prouincia.

65 Y Simõ ſe acercó à Bethsuran, y la cõbatió por muchos dias, y los encerró.

66 Y demandaronle que les dieſſe la diestra, y el ſe la dió: y echandolos de alli, tomò la ciudad, y puso en ella guarnicion.

67 Ionathas llegó con ſu campo àl agua de Genesar, y antes del dia madrugaron àl campo de Asor.

68 Y heaqui que el campo de los estrangeros les ſalia àl encuentro en la campaña auiendole pueſto emboscada en los montes: mas el les venia àl encuentro por delante.

69 Y la emboscada ſe leuantó de ſu lugar, y dieron batalla.

70 Y los que eſtauan de la parte de Ionathas todos huyeron, que ninguno de ellos quedó, ſino fue Mathathias hijo de Absalomi, y Iudas hijo de Calphi Maestre de campo del exercito.

71 Entonces Ionathas rompió ſus veſtidos, y puso tierra en ſu cabeça, y oró.

72 Y tornó à ellos en batalla, y hizolos boluer à huyr, y pelearon.

73 Y los de ſu parte como los vieron huyr, tornaronſe à el, y siguieron cõ el todos el alcance haſta Cades, donde teniã el real, y llegaron haſta alla.

74 Y cayeron à quel dia de los estrangeros tres mil hombres, y Ionathas ſe tornó à Ieruſalem.

I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 12

1 Y ViendoIonathas que la opportunidad le ayundaua, eſcogió hombres, los quales embió à Roma para confirmar y renouar con ellos el amistad.

2 Y à los de Lacedemonia, y à otros lugares embió tambien letras en la misma forma.

3 Los quales, como vinierõ à Roma, entraron en el Senado, y dixerõ, Ionathas el summo Sacerdote y la gente de los Iudios nos embia acà, paraque renouemos con vosotros el amistad y la confederacioncomo antes.

4 Y ellos les dierõ letras para todos los que eſtauan por los lugares, paraque los lleuaſſen en tierra de Iuda con paz.

5 Esta es la copia de las letras que escriuió Ionathas à los Lacedemonios.

6 Ionathas summo Sacerdote, y el consejo de la nacion, y los Sacerdotes, y todo el pueblo de los Iudios à los Lacedemonios nuestros hermanos, salud.

7 En el tiempo paſſadoArio que reynaua en vosotros embió letras à Onias summo Sacerdote, como erades nuestros hermanos, como ſe contiene en el eſcriptoque ſe sigue.

8 Y Onias recibió àl mensagero honradamente y tomó las letras en que ſe le hazia ſaber el amistad y aliança.

9 Y aunque noſotros ninguna neceſsidad tengamos de eſto, teniendo nuestro contentamiento en los sanctos libros, que tenemos en nuestras manos.

10 Toda via quesimos embiar à renouar con vosotros la hermádad y amistad, porque con los muchos tiempos que han paſſado deſpues que embiastes à noſotros, no nos ayays por estraños.

11 Nosotros pues en todo tiempo ſin cesar, anſi los dias solemnes, comolos demas que conuiene, nos acordamos de vosotros en los sacrificios que hazemos, y en las oraciones, como es juſto, y cõuiene que los hermanos ſe acuerden.

12 Ansimismo nos alegramos de vuestra gloria.

13 Y aunque nos han rodeado muchas afliciones, y muchas guerras, y auemos sido combatidos de los reyes que eſtan alderredor de noſotros.

14 Nunca en estas guerras auemos querido seros moleſtos, ni à los de mas confederados y amigos nuestros.

15 Porque auemos tenido ayuda del cielo, que nos ha ayudado, cõque noſotros auemos sido librados, y nuestros enemigos abatidos.

16 Portanto auemos escogido à Numenio de Antiocho, y à Antipatro de Iason, los quales hemos embiado à los Romanos para renouar con ellos el amistad, y confederacion paſſada.

17 A los quales hemos tambien mandado, que vengan à vosotros, y os saluden, y os dén nuestras letras de renouaciõ de nueſtra hermandad.

18 Portanto bien hareys aora sinos respondierdes à ellas.

19 Y eſte es el traslado delas letras que Ario embió à Onias.

20 El rey de los Lacedemonios à Onias summo Sacerdote salud.

21 Hase hallado por escriptura à cerca de los Lacedemonios y Iudios, que ſon hermanos, y que ſon del linage de Abraham.

22 Loqual deſpues que aora lo auemos entendido, parece nos que hareys bien sinos escriuierdes de vuestra prosperidad.

23 Y noſotros tambien os escriuimos, que nuestros ganados y nuestras haziendas ſon vuestras, y las vuestras nuestras: portanto mandamos, que eſto ſe os hizieſſe ſaber.

24 Y oyó Ionathas que los principes de Demetrio tornãuan à pelear cõ el cõ exercito mucho mayor que el primero.

25 Y ſalió de Ieruſalem, y vinoles àl encuentro en la prouincia de Amathite, porque no les queria dar espacio para que entraſſen en ſu tierra.

26 Y embió espias àl campo de ellos, las quales boluiendo dieron auiso que tenian determinado de dar ſobre ellos de noche.

27 Mas como el sol ſe puso, Ionathas mãdó à los suyos que velaſſen, y que estuuieſſen en armas prestos para pelear toda la no che: y puso centinelas en derredor del cãpo.

28 Y los enemigos entendiendo que Ionathas con los suyos eſtaua apercebido para la batalla, vuieron temor, y desmayaron en ſus animos, y encendieron fuegos por todo ſu campo.

29 Loqual Ionathas y los que con el eſtauan no entendieron haſta la mañana, por que vian los fuegos ardiendo.

30 Y siguiolos Ionathas, mas no los pudo alcançar, porque ya auian paſſado el rio Eleuthero.

31 Y anſi Ionathas torció el camino hazia los Arabes llamados Zabadeos, à los quales hirió, y tomó ſus despojos.

32 Y de alli juntó ſu campo, y vino à Damasco, y corrió toda aquella region.

33 Simon tambien ſalió, y vino haſta Ascalon, y haſta las fuerças cercanas; y de alli torció el camino hazia Ioppe, y tomola.

34 Y porquãto auia entendido que ellos querian dar la fortaleza à la parte de Demetrio, puso en ella guarniciõ que la guardaſſe.

35 En boluiendo Ionathas, conuocó los Ancianos del pueblo, y consultó con ellos de edificar fortalezas en Iudea:

36 Y de edificar muros à Ieruſalem, y de leuantar vna grande altura entre la fortaleza y la ciudad que la apartaſſe de la ciudad, paraque la fortaleza estuuieſſe aparte, y losque dentro estuuieſſen, no tuuieſſen facultad de comprar ni de vender.

37 Y juntaronſe para edificar la ciudad, porque el muro que eſtaua ſobre el arroyo hazia el nacimiento del sol, eſtaua caydo: y repararonlo, y puſieronle por nombre Caphenata.

38 Y Simon edificó à Adiada en Sephela, y fortificóla, y pusole puertas y cerraduras.

39 Triphon pues pensando de reynar en Aſia, y tomar corona, y estender la mano contra el rey Antiocho:

40 Temiendo que Ionathas no ſe lo permitiria, mas que tomaria guerra contra el, buscaua manera de prenderlo, y de matarlo: y anſi ſe partió, y ſe fue à Bethsan.

41 Y Ionathas le ſalió àl encuentro en batalla con quarẽta mil hombres escogidos, y vino à Bethsan.

42 Y viendo Triphon que Ionathas venia con grande exercito para estender la mano contra el, temió.

43 Y recibiolo honrradamente, y alabolo à todos ſus amigos, y diole dones: y mãdó à ſus amigos y àsu gente que lo obedecieſſen como à ſi mismo.

44 Y à Ionathas dixo, Porque has fatigado todo eſte pueblo, no auiendo guerra entre noſotros?

45 Aora pues embialos à ſus casas escogiendote algunos pocos que queden contigo, y ven conmigo à Ptolemayda, y entregartelahé con las de mas guarniciones, y exercito, y con todos los gouernadores de los negocios; y eſto hecho tornarmehé, porque para eſto he venido.

46 Y el creyendolo, hizo como le dixo, y embió el exercito, los quales ſe fueron à la tierra de Iuda:

47 Solamente detuuo consigo tres mil hombres, de los quales los dos mil tornó à embiar à Galilea, y los mil vinieron con el.

48 Mas como Ionathas entró en Ptolemayda, los de Ptolemayda cerraron las puertas de la ciudad, y prendieronlo àel: y à todos los que con el entraron, mataron à cuchillo.

49 Y Triphon embió la gente de pie y la caualleria en Galilea, y à la gran campaña paraque destruyeſſen à todos los compañeros de Ionathas.

50 Mas ellos entendiendo que Ionathas era preso, y que auia perecido cõtodos los que con el eſtauan, animaronſe los vnos à los otros, y ſalieron apercebidos à la batalla.

51 Y viendolos losque los seguian, y que la pelea auia de ſer por la vida, tornaronſe.

52 Y los otros todos vinieron en paz à la tierra de Iudea, y lloraron mucho à Ionathas y à todos los que conel estauã, y Iſrael lloró con gran llanto.

53 Y todas las gentes que eſtauan alderredor dellos, procurarõde destruyrlos del todo.

54 Porque dezian, No tienen principe, ni quien les ayude: combatamoslos pues aora, y quitemos ſu memoria de entre los hombres.

I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 13

1 Entoncesoyendo Simon, que Triphon auia juntado grande exercito para venir en tierra de Iuda, y destruyrla:

2 Y viẽdo que el pueblo eſtaua en temor y en temblor, subió à Ieruſalem, y cõuocó el pueblo:

3 Y animandolos, dixo, Vosotros sabeys quanto auemos hecho yo, y mis hermanos, y la caſa de mi padre porlas leyes y por la religiõ, y enque guerras y angustias nos hemos viſto.

4 Porque por eſta cauſa ſon muertos por Iſrael todos mis hermanos, y yo solo quedo.

5 Y nunca tal me acaezca que aora ni en todo tiempo de tribulacion yo quiera cõseruar mi vida, pues yo no ſoy mejor que mis hermanos.

6 Antes defenderé mi nacion, y religiõ, y nuestros hijos, y mugeres: porque todas las gentes ſe han jũtado para destruyrnos por cauſa de enemistad.

7 Entonces el eſpiritu de todo el pueblo ſe tornó à encender en oyendo estas palabras.

8 Y respõdieron à gran boz, diziẽdo, Tu eres nuestro capitan en lugar de Iudas, y de Ionathas, tus hermanos.

9 Toma à cargo nueſtra guerra: y todo lo que nos mandâres, haremos.

10 Entonces el juntó todos los hombres de guerra, y ſe dió prieſſa à acabar todos los muros de Ieruſalem; y fortificóla entorno.

11 Y embió à Ionathas hijo de Absalomi, y conel el nueuo exercito en Ioppe, el qual echando fuera losque eſtauan en la fortaleza, el sequedó alli.

12 Entretanto Triphon mouió de Ptolemayda con grande exercito para venir en tierra de Iuda, trayendo cõ sigo à Ionathas en guarda.

13 Y Simõ llegó à Addus à vista de la cãpaña.

14 Y como Triphon entẽdió que Simõ ſe auia leuantado en lugar de ſu hermano Ionathas, y que venia para darle batalla, embiole mensageros.

15 Diziẽdo, Por el dinero que tu hermano Ionathas deuia en las cuẽtas del rey, à cauſa de los negocios que tuuo, lo hemos detenido.

16 Embia pues aora ciẽ talẽtos, y ſus dos hijos en rehenes, por que soltãdolo no nos quiebre la palabra, y soltarlohemos.

17 Y entẽdió Simõ que trataua conel cõ engaño, cõ todo eſſo mãdo dar el dinero, y los moços, por no incurrir en algun grande odio acerca del pueblo.

18 Que diria, que por no auerle embiado el dinero y los moços,el auia sido muerto.

19 Embió pues los moços, y los ciẽ talẽtos, mas el otro le mintió, y no soltó à Ionathas.

20 Despues de eſto vino Triphõ la tierra adentro para destruyrlo: y hizierõ buelta por el camino que vá à Ador, y Simõ Y ſu cãpo caminauan por dõde quiera que ellos yuan.

21 Mas los que eſtauan en la fortaleza, embiarõ mensageros à Triphõ que ſe apresuraſſe à venir por el desierto, y à embiarles vitualla.

22 Y Triphõ apercibió toda la caualleria, para venir aquella noche: mas vuo tanta nieue que no pudo venir, y quedóse en Galaad.

23 Y llegando à Bascama, mató à Ionathas, el qual fue alli enterrado.

24 Y Triphõ ſe tornó, y ſe vino à ſu tierra.

25 Y Simõ embió y tomó los huesos de Ionathas ſu hermano, y enterrolos en Modin ciudad de ſus padres.

26 Y todo Iſrael lo lamentó cõ grãde llãto, y lo llorarõ muchos dias.

27 Y Simõ edificó ſobre el sepulchro de ſus padres y de ſus hermanos vn edificio muy alto para ver de piedra labrada delãte y de tras.

28 Y puso ſiete piramides, la vna cõtra la otra à ſu padre y à ſu madre, y quatro à ſus hermanos.

29 Al derredor de las quales puso grandes colũnas, y ſobre las colũnas las armas para perpetua memoria: y jũto à las armas nauios esculpidos que fueſſen vistos delos que nauegaſſen la mar.

30 Este es el sepulchro que hizo en Modin haſta oy.

31 Triphon pues tratando con engaño con el moço rey Antiocho, àl fin lo mató.

32 Y reynó en ſu lugar, y pusose la corona de Aſia, y hizo grande estrago en la tierra.

33 Y Simõ reedificó las fortalezas de Iudea, y fortificola de altas torres, y de grãdes muros, y de puertas, y cerraduras, y puso vituallas en las fortalezas.

34 Y eſcogió hombres, los quales embió àl rey Demetrio, para que dieſſe libertad à la tierra, porque todos los hechos de Triphon no eran ſino robos.

35 Y Demetrio respondió à estas palabras, y escriuió letras en eſta forma.

36 El rey Demetrio à Simon summo Sacerdote, y amigo de los reyes, y àl Senado, y nacion de los Iudios, salud.

37 La corona de oro y el collar que embiastes, recebimos;y estamos prestos para hazer con vosotros gran paz, y escreuir à los officiales reales, para que os suelten lo que os auemos concedido.

38 Y que todo lo que auemos concertado cõ vosotros, ſea firme, Que las fortalezas que aueys edificado, ſean vuestras.

39 Ansi mismo os perdonamos las ignorancias, y offensas de haſta oy, y la corona que nos deuiades; y ſi algun otro tributo ſe pagaua en Ieruſalẽ, que ya no ſe pague mas.

40 Y que ſi algunos de vosotros ſon aptos para ſer escriptos entre los nuestros, lo ſean, y aya entre noſotros paz.

41 En el año ciento y setenta fue quitado el yugo de las Gentes de Iſrael;

42 Y comẽçó el pueblo de Iſrael à escriuir en las tablas y instrumentos publicos, En el año primero ſiendo Simon summo Sacerdote, capitã y prĩcipe de los Iudios.

43 En aquellos dias llegó Simõ à Gaza, y cercola cõ cãpo, y hizo ingenios: y llegó à la ciudad, y batió vna torre, y tomóla.

44 Y saltaron los que estauã dentro del ingenio en la ciudad, y vuo en la ciudad grande alboroto.

45 Y los ciudadanos ſe subieron con ſus mugeres y hijos ſobre el muro, rotos ſus veſtidos;y clamarõ con grãde boz pidiendo à Simon que les dieſſen las diestras.

46 Diziendo, No nos pagues cõforme à nuestras maldades, mas ſegun tus misericordias.

47 Y Simon vuo compaſsion, y no los destruyó, mas echólos de la ciudad, y limpió los templos en que auian estado los idolos; y entonces entró en ella bendiziendo àl Señor con cantares.

48 Y echando de ella tota immundicia, puso en ella hõbres que pusieſſen en essecucion la Ley; y fortificola, y hizo en ella caſa para ſi.

49 Los que eſtauan en la fortaleza de Ieruſalem, no eran consentidos ſalir ni entrar en la tierra, ni comprar ni vender y vuierõ gran hambre, tanto que muchos de ellos perecieron de hambre.

50 Y clamaron à Simon que les fueſſen dadas las diestras, y el lo cõcedió, y echolos de alli: y limpió la fortaleza de las contaminaciones.

51 Y à los veynte y tres dias delmes Segundo del año ciento y setenta y vno, entro en ella cõ alabãças, y cõ ramos de palma, con harpas, y organos, y cimbalos, y hymnos, y cantares, porquãto el enemigó grande de Iſrael auia sido quebrantado.

52 Y instituy ó que estos dias ſe celebraſſen con alegria en todos los años.

53 Y fortifició el monte del templo, que eſtaua junto à la fortaleza, y habitó alli el y los que eſtauan con el.

54 Y viendo Simon que Ioã ſu hijo era valiente hõbre de guerra, pusolo por capitan de todo el exercito, y que habitaſſe en Gaza.

I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 14

1 EN el año ciento y setenta y dos el rey Demetrio juntó ſu exercito, y partióse à Media para traer de alla socorro, y hazer guerra à Triphon.

2 Y oyendo Arsaces rey de Persia y de Media, que Demetrio auia entrado en ſus terminos, embió vno de ſus principes que lo prendieſſe biuo.

3 El qual fue, y hirió el exercito de Demetrio, y prendiolo à el, y truxolo à Arsaces, el qual lo puso en prision.

4 Y toda la tierra de Iuda tuuo repoſo todos los dias de Simon, el qual procuró biẽ para ſu nacion, y ſu potencia y honrra les fue siempre agradable.

5 Y con toda ſu gloria tomó tambien à Ioppe por puerto: y hizo entrada à las islas de la mar.

6 Ensanchó los terminos de ſu nacion y fue señor en la prouincia.

7 Iuntó muchos captiuos, y enseñoreose de Gaza, y de Bethsuran y de la fortaleza: y quitó de ella las immundicias, y ya no auia quien le reſiſtieſſe.

8 Cada vno labraua ſu tierra en paz, y la tierra de Iuda daua ſus frutos, y los arboles de los campos el suyo.

9 Los Ancianos ſe sentauan en las plaças todos, y consultauan del Bien de la tierra: y los mancebos ſe vestian honrrosamente, y de habitos de guerra.

10 A las ciudades daua bastimentos, y las ponia en orden, para que fueſſen instrumẽtos de fortaleza: tãto que ſu fama fue nombrada, haſta el fin de la tierra.

11 El hizo la paz ſobre la tierra, y que Iſrael ſe alegraſſe de grande alegria.

12 Cada qual ſe aſſentaua de baxo de ſu parra, y de baxo de ſu higuera: y no auia quien les pusieſſe miedo.

13 Porque ya no auia ſobre la tierra quiẽ les acometieſſe, y los reyes eran quebrantados en aquellos dias.

14 El confirmaua à todos los baxos de ſu pueblo, y procuraua la Ley, y quitaua à todo iniquo y malo.

15 El glorificó el Sanctuario, y augmentó los sanctos vaſos.

16 Y como en Roma y haſta los Lacedemonios ſe oyó que Ionathas era muerto, todos fueron muy tristes.

17 Mas como oyeron que Simon ſu hermano era hecho summo Sacerdote en ſu lugar, y que el posseya toda la prouincia y las ciudades deella:

18 Escriuieronle en tablas de metal, renouando las amistades y confederacion,que auian hecho con Iudas y con Ionathas ſus hermanos.

19 Y las letras fueron leydas en preſencia de la Igleſia en Ieruſalem, y eſta es la copia de las letras que embiaron los Lacedemonios.

20 Los principes de los Lacedemonios, y la ciudad, à Simon summo Sacerdote, y à los Ancianos, y Sacerdotes, y à toda la resta del pueblo de los Iudios ſus hermanos, salud.

21 Los embaxadores, que fueron embiados à nuestro pueblo, nos hizieron ſaber vuestra gloria, y honrra, y alegria, y con la venida de ellos nos alegramos.

22 Y escreuimos ſu relacion en los actos de la Republica anſi, Numenio de Antiocho, y Antipatro hijo de Iason embaxadores de los Iudios vinieron à noſotros para renouar con noſotros el amistad paſſada:

23 Y plugo àl pueblo de recebirlos honrrosamẽte, y poner la copia de ſus palabras en los libros publicos del pueblo, paraque la memoriaquede para siẽpre àl pueblo delos Lacedemonios, y la copia de eſto escriuimos à Simõ summo Sacerdote.

24 Despues de eſto Simõ embió à Numenio à Roma con vn grande escudo de oro, que pesaua mil minas, para cõfirmar con ellos la cõfederacion.

25 Y como el pueblo oyó eſto, dixerõ, Cõque agradecimiento pagaremos à Simõ y à ſus hijos?

26 Porque el cõ ſus hermanos y la caſa de ſu padre cõfirmarõ à Iſrael, y vencidos en guerra los enemigos lo pusierõ en liber tad. y escriuierõlo en tablas de Metal, las quales pusierõ en colũnas en el mõte de Sion.

27 Y eſta es la copia de la escriptura, A los ocho dias del mes de Elul del año ciẽto y setenta y dos, en el año tercero de Simõ summo Sacerdote en Asaramel.

28 Enel gran conuento de los Sacerdotes, y del pueblo, y de los principes de la nacion, y de los Ancianos de la prouincia, fueron declaradas estas coſas, Que por auer tenido con tinuas guerras en nueſtra prouincia.

29 Simon hijo de Matathias de los hijos de Iarib, y ſus hermanos, ſe entregaron àl peligro, y reſiſtieron à los aduersarios de ſu nacion: porque ſu religion y ſu ley permanecieſſen: y honraron ſu nacion cõ grãde gloria.

30 Y Ionathas juntò ſu nacion, y fue cõstituydo por ſu grã Sacerdote, el qualsiẽdo pueſto con ſu pueblo.

31 Sus enemigos quisieron hollar y saquear ſu prouincia, y estẽder las manos en ſus Sanctuarios.

32 Entonces Simon reſiſtió, y peleó por ſu nacion: y gastó muchos dineros de ſu hazienda, y armó los valientes de ſu nacion, y les dió sueldo.

33 Y fortificó las ciudades de Iudea, y à Bethsuran, que eſtá en los terminos de Iudea, donde eſtauan antes las armas de los enemigos, y puso en ella guarnicion de Iudios.

34 Fortificó tambien à Ioppe, que eſta junto à la mar, y à Gaza en los terminos de Azoto, donde antes morauan enemigos; y puso en ella Iudios, y los proueyó de todas las coſas neceſſarias para ſu reparacion.

35 Conſiderando pues el pueblo la lealtad de Simon, y la gloria conque deſſeó honrrar à ſu nacion, lo leuantaron por ſu capitan y por principe de los Sacerdotes, por auer hecho todas estas coſas: y por la justicia y fe que guardó à ſu nacion, y por auer procurado por todas maneras de engrandecer ſu pueblo.

36 En cuyos tiempos vuo tanta prosperidad en ſus manos, que las Gentes fueſſen quitadas de ſu prouincia, y los que eſtauan en la ciudad de Dauid en Ieruſalem en la fortaleza: de la qual ſalian, y contaminauan todo loque eſtaua arredor del Sanctuario, y hazian grande estrago en la limpieza.

37 Y puso en ella Iudios, y fortificóla para defensa de la prouincia y de la ciudad: y alçó los muros de Ieruſalem.

38 Y el rey Demetrio le cõfirmó el summo Sacerdocio.

39 Por las quales coſas lo hizo ſu amigo, y lo adornó de grande gloria:

40 Porquanto oyó que los Iudios eran llamados amigos, y aliados, y hermanos de los Romanos, y que auian recebido hõrradamente los embaxadores de Simon.

41 Y que los Iudios y ſus Sacerdotes auian consentido en que Simon fueſſe ſu principe y summo Sacerdote perpetuamente, haſta tanto que ſe leuantaſſe Propheta fiel.

42 Y que fueſſe capitan ſobre ellos, y que tuuieſſe cargo del Sanctuario: y que pusieſſe gouernadores ſobre ſus obras, y ſobre la prouincia, y ſobre las armas, y ſobre las for talezas.

43 Y que tuuieſſe cuy dado del Sanctuario, y que fueſſe obedecido de todos, y que todos los instrumentos de la prouincia ſu eſſen escriptos en ſu nombre, y que pudies ſe traer purpura y oro.

44 Y que à ninguno del pueblo ni de los Sacerdotes fueſſe licito inualidar nada de eſto, ni contradezir à loque el dixeſſe: ni cõuocar ſin el junta en la prouincia, ni vestir purpura, ni vsar de cinto de oro.

45 Y que ſi alguno hizieſſe contra eſto, ò quebrantaſſe alguna de estas coſas, fueſſe culpado.

46 Y plugo à todo el pueblo de cõstituyr à Simon, y hazer cõforme à estas palabras.

47 Y Simon lo consitió, y le plugo de vsar del oficio de summo Sacerdote, y ſer capitan y principe de la nacion de los Iudios, y de los Sacerdotes, y de presidir en todas las coſas.

48 Y acordaron que eſta escriptura fueſſe puesta en tablas de metal, las quales fues sen puestas en la cerca del Sãctuario en lugar eminente.

49 Mas que la copia de estas coſas fueſſe puesta en el erario paraquelo vuieſſen Simon y ſus hijos.

I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 15

1 Y El rey Antiocho hijo de Demetrio embió letras desde las islas de la mar à Simon Sacerdote y Princide de la nacion de los Iudios, y à toda la nacion:

2 En que ſe contenia de eſta manera, El rey Antiocho à Simon summo Sacerdote, y à la nacion de los Iudios, salud.

3 Porquanto algunos pestilentes hõbres occuparon el reyno de mis padres, yo lo quiero defẽder y restaurarlo como era antes: por loqual he ayuntado multitud de exercitos, y he hecho hazer nauios de guerra.

4 Y quiero yr por la prouincia para vengarme de los que hã destruydo nueſtra tierra y aſſolado muchas ciudades en mi reyno.

5 Portãto aora yo te confirmo todas las immunidades, que todos los reyes antes de mi, tehan concedido: y todos los tributos que te han soltado.

6 Y te permitto batir propia moneda en tu prouincia.

7 Y que Ieruſalem ſea sancta y libre; y que todas las armas que has hecho, y las fuerças que has edificado, y tienes, ſean tuyas.

8 Y que toda deuda del rey, y loque le pertenece de aqui para siempre, te ſea suelto.

9 Y quando tuuieremos nuestro reyno, te honrraremos à ti y à tu naciõ, y àl templo de grãde gloria, de tal manera que vuestra gloria ſea manifestada en toda la tierra.

10 En el año ciento y setenta y quatro ſalió Antiocho à la tierra de ſus padres, y todos los exercitos ſe vinieron à el, de tal manera que quedaron pocos con Triphõ.

11 Y el rey Antiocho lo persiguió, elqual vino huyendo à Doram ciudad maritima.

12 Porque sabia que muchos males ſe amõtonauã ſobre el, y el exercito lo auia dexado.

13 Y Antiocho llegó ſobre Doram conciento y veynte mil hombres de guerra, y ocho mil cauallos.

14 Y cercó la ciudad, y los nauios ſe llegaron por la parte de la mar, anſi que la ciudad era apremiada por mar y por tierra, y à nadie consentian entrar ni ſalir.

15 En eſte tiempo vino Numenio, y ſus compañeros, de Roma trayendo letras para los reyes y las prouincias, en las quales ſe contenian estas coſas.

16 Lucio Consul de los Romanos àl rey Ptolemeo, salud.

17 Los embaxadores de los Iudios nuestros amigos y aliados vinieron à noſotros embiados de Simon príncipe de los Sacerdotes, y del pueblo de los Iudios, para renouar el amistad y confederacion antigua.

18 Y truxeron vn escudo de oro de mil minas.

19 Por loqual nos plugo escreuir à los reyes, y à las prouincias, que ningun mal les ſea hecho, ni les mueuã guerra, ni à ſus ciudades ni prouincias, ni den ayuda à los que peleáren contra ellos.

20 Tambien nos pareció tomar deellos el escudo.

21 Portanto ſi algunos malos hombres de ſu prouincia ſe acogieren à vosotros, entregarlosheys à Simon Principe de los Sacerdotes, paraque los castigue conforme à ſu ley.

22 Esto mismo ſe escriuió àl rey Demetrio, à Attalo, à Arathe, à Arsaces:

23 Y à todas las prouincias, Sãsama, Spar ta, Delo, Myndo, Sicyõ, Caria, Samo, Pamphilia, Lycia, Halicarnaso, Rhodas, Pharſe lida, Coo, Sidam, Cortina, Gnido, Cypro y Cyrene.

24 Y la copia de estas coſas fué escripta à Simon principe de los Sacerdotes.

25 El rey Antiocho llegó el campo la segunda vez à Doram, metiendo siẽpre la mano, y haziendo ingenios. y encerró à Tryphon que no pudieſſe ſalir.

26 Y Simon le embió dos mil hombres escogidos que le ayudaſſen, y tambiẽ plata, y oro, y muchos vaſos.

27 Mas el nolo quiſo recebir, antes rompió todo loque con el auia antes cõcertado, y ſe apartó de ſu amistad.

28 Y embiole à Athenobio vno desus amigos, paraque trataſſe con el diziendo, Vosotros teneys à Ioppe y à Gaza y la fuerça de Ieruſalem, que ſon ciudades de mi reyno.

29 Aueys aſſolado ſus terminos, y aueys hecho grã destruyciõ en la tierra: y aueys os enseñoreado de muchos lugares por mi reyno.

30 Entregadme pues aora las ciudades que aueys tomado, y los tributos de los lugares enque os au eys enseñoreado fuera de los terminos de Iudea.

31 Y ſi no, pagad por ellos cincuenta talẽ tos de plata, y por el daño que aueys hecho à la prouincia, y por los tributos de las villas, otros quinientos: de otra manera vendremos y moueroshemos guerra.

32 Y Athenobio amigo del rey vino à Ieruſalem, y viendo la magnificencia de Simon, y ſu grandeza, en oro, y en plata, y ſu grande apparato, fué espantado, y recitole las palabras del rey.

33 Y Simon le respondió, y dixo, Ni noſotros hemos tomado la tierra de otre, ni la poſſeemos, ſi no la herẽcia de nuestros padres que por algun tiempo hà sido posseyda de nuestros enemigos injustamente.

34 Mas quando noſotros tuuimos la opportunidad, defendimos la herencia de nuestros padres.

35 Quanto à lo de Ioppe y de Gaza que tu pides, ellas hazian grande daño en nuestro pueblo, y en nueſtra prouincia: porellas daremos cien talentos. Y Athenobio no respondió palabra:

36 Antes ſe boluió enojado àl rey, àlqual contó estas palabras, y la magnificencia de Simon con todo loque auia viſto. Y el rey ſe enojó con grãde yra.

37 Mas Triphõ huyó en vn nauio en Orthosayda.

38 Y el rey puso à Cendebeo por capitã de la costa de la mar, y diole el exercito de la gente de pie, y de cauallo, y mandole que mouieſſe el campo contra ludea, y que edificaſſe à Cedron, y que cerraſſe las puertas de la ciudad, y que hizieſſe la guerra àl pueblo, y el persiguió à Triphon.

40 Y Cendebeo llegó à Iamnia, y comẽçó à irritar el pueblo, y à moleſtar la tierra de Iudea, y à prender y matar el pueblo, y à edificar à Cedron.

41 Y puso alli gente de cauallo y escuadrõ de pie, paraque ſalieſſen, y corrieſſen los caminos de Iudea, como el rey auia mãdado.

I. LIBRO. DE LOS MACHAB. 16

1 EntoncesIoan subió de Gaza, y cõtó à ſu padre loque Cendebeo auia hecho.

2 Y Simon llamó ſus dos hijos mayores, Iudas y Ioã, y dixoles, Yo, y mis hermanos, y la caſa de mi padre, auemos sustentado la guerra contra los enemigos de Iſrael desde nueſtra mocedad haſta oy: y hà auido prosperidad en nuestras manos para librar à Iſrael algunas vezes.

3 Empero aora ya yo ſoy viejo, mas vosotros soys idoneos en edad y piedad. Succeded pues en mi lugar y de mi hermano. y ſalid à pelear por nueſtra gente, y el ayuda del cielo ſea con vosotros.

4 Y eſcogió de la prouincia veynte mil hombres de guerra, y algunos de cauallo, y partieronſe contra Cendebeo, y durmieron en Modin [aquella noche.]

5 Y leuantandoſe por la mañana, ſalierõ à la campaña, y heaqui vn grande exercito de pie y de cauallo que los venia à recebir, y auia vn arroyo que corria entre los dos exercitos.

6 Y Ioã y ſu pueblo aſſentarõ el cãpo deláte de los otros: y viẽdo que elpueblo temia de paſſar el arroyo, paſſó el primero: y como los otros le vieron, paſſaron enpos del.

7 Y diuidió el pueblo y puso los de caua llo entre la gente de pie: mas la caualleria de los cõtrarios era mucha en grã manera.

8 Mas como tocaron las sacras trompetas, Cendebeo y ſu campo huyó, y cayerõ de ellos muchos heridos: y los que quedaron, ſe acogeron à la fortaleza.

9 Entonces fué herido Iudas el hermano de Ioan, mas Ioã lo siguió haſta venir à Ce dron, laqual auia edificado Cendebeo.

10 Y huyeron haſta las fortalezas que eſtan en los campos de Azoto, y el les puso fuego: y mataron deellos dos mil hombres, y tornose à Iudea en paz.

11 Auia entõces vn Ptolemeo hijo de Abubo, el qual eſtaua por capitã en la cãpaña de Iericho, y tenia mucho oro y plata.

12 Porque era yerno del summo sacerdote.

13 Y ensoberueciẽdoſe ſu coraçõ, pretẽdia tomar la prouincia: y pensaua engaño contra Simon y ſus hijos por matarlos.

14 Y andãdo Simon por las ciudades de la prouincia de Iudea, y teniẽdo solicitud por ellas, decendió en Iericho el y Mathatias y Iudas ſus hijos, en el año ciento y ſe tenta y ſiete en el mes Onzeno, elqual es el mes de Sabat.

15 Y el hijo de Abubo los recibió cõ engaño en vna pequeña fortaleza, que el auia edificado, que ſe llama Doch, donde les hizo gran vanquete, y auia escondido hombres.

16 Y quãdo Simon y ſus hijos fueron embriagados, Ptolemeo ſe leuantó con los ſu yos, y tomaron ſus armas, y entraron àl vá quete, y mataron à el y à ſus dos hijos, y al gunos de ſus criados.

17 Esta grande traycion hizo en Iſrael, dando males por bienes.

18 Y escriuiendo estas coſas Ptolemeo àl rey, embiole à pedir exercito en ayuda, y que el le entregaria la prouincia con ſus ciudades, y tributos.

19 Y à otros embió à Gaza que tomaſſen à Ioan: y à los Tribunós embió letras que ſe vinieſſen à el, que el les daria plata y oro y dones.

20 Y à otros embió à que tomaſſen à Ieruſalem, y àl monte del templo.

21 Mas como vno corrieſſe delante, y dieſſe auiso à Ioan en Gaza, que ſu padre era muerto, y ſus hermanos: y que tambien embiaua para matarlo à el:

22 Oyendo el eſto espantose en grã manera, y prendió à los que auian venido à matarle, y matolos: porque entendió que ellos pretendian matarle à el.

23 Todos los de mas negocios de Ioã, y ſus guerras, y ſus buenas valẽtias en las qua les ſe vuo valerosamente, y el edificio de los muros que edificó, y las coſas que hizo.

24 Heaqui que todas ellas estã escriptas en el libro de los tiempos de ſu Sacerdocio, desde que fué hecho Principe delos Sacer dotes deſpues de ſu padre.

FIN DEL PRIMERO LIBRO DE los Machabeos.

EL APOCALY. DE S. IOAN. 1

1 REEVELACION de IESVS el Chriſto, laqual Dios le dió para manifestar à ſus sieruos las coſas que con viene que seã hechas presto: y las declaró, embiandola por ſu Angel à Ioan ſu sieruo.

2 El qual ha dado testimonio de la palabra de Dios, y del testimonio de Iesus el Chriſto, y de todas las coſas que ha viſto.

3 Bienauẽturado el que lee, y losque oyen las palabras desta Prophecia, y guardan las coſas que en ella eſtan escriptas: porque el tiempo eſta cerca.

4 Ioan, à las ſiete Iglesias que eſtan en Aſia, Gracia ſea cõ vosotros, y paz delque es y que era, y que ha de venir, y de los ſiete Espiritus que eſtan delante de ſu throno.

5 Y de IESVS el Chriſto,que es teſtigo fiel, Primogenito de los muertos, y Principe de los Reyes de la tierra: que nos amó, y nos hà lauado de nuestros pecadoscõ ſu sangre.

6 Y nos hà hechoReyes, y Sacerdotes para Dios y ſu Padre, à el ſea gloria y imperio para siempre jamas. Amen.

7 Heaqui, viene con las nuues, y todo ojo lo vera,y losque lo traspassárõ, y todos los linages de la tierra ſe lamentarán ſobre el: Ansi, Amen

8 Yo ſoyayw: principio y fin, dize el Señor, que es, y que era, y que ha de venir, el todo Poderoso.

9 Yo Ioan vuestio Hermano, y participante en la tribulacion, y en el Reyno, yenla paciẽcia de IESVS el Chriſto, eſtaua en la isla que es llamada Patmos, por la palabra de Dios, y el testimonio de IESVS el Chriſto.

10 Yo fue en Espũ en di de domingo, y oy detràsde mivna gran boz como de trompeta.

11 Que dezia: Yo ſoyayw, el primero y postrer o: Escriue en vn libro loque vees, y embialo à las ſiete Iglesias, que están en Aſia,es à ſaberà Epheso, y à Smyrna, y à Pergamo, y á Thyatira, y à Sardo, y a Philadelphia, y Laodicea.

12 Y boluîme para ver la boz que hablaua cõmigo: y buelto, vide ſiete candeleros de oro.

13 Y en medio de los ſiete candeleros de oro, vno semejante àl Hijo del hombre, veſtido de vna ropa que llegaua haſta los pies, y ceñido con vna cinta de oro por las tetas.

14 Y ſu cabeça y ſus cabellos eran blancos como la lana blanca, y como la nieue, y ſus ojos como llama de fuego.

15 Y ſus pies semejantes àl laton finiſsimo, ardientes como en vna hornaza: y ſu boz como ruydo de muchas aguas.

16 Y tenia en ſu diestra ſiete eſtrellas: y de ſu boca salîa vn espada de dos filos. Y ſu rostro era reſplandeciente como el sol resplandece en ſu fuerça.

17 Y quando yo lo vue viſto, cay como muerto à ſus pies: Y el puso ſu diestra ſobre mi, diziendome: No temas,yo ſoy el primero y el postrero.

18 Y el que biuo, y he sido muerto, y heaqui biuo por ſiglos de ſiglos. Amen. Y tengo las llaues del infierno, y de la muerte.

19 Escriue las coſas, que has viſto, y las que ſon, y las que han de ſer deſpues destas.

20 El secreto de las ſiete eſtrellas que has viſto en mi diestra, y los ſiete candeleros de oro. Las ſiete eſtrellas, ſonlos Angeles de las ſiete Iglesias, y los ſiete candeleros que has viſto, ſon las ſiete Iglesias.

EL APOCALY. DE S. IOAN. 2

1 Escriue àl Angel de la Igleſia de Ephe so: El que tiene las ſiete eſtrellas en ſu diestra, elqual anda en medio de los ſiete candeleros de oro, dize estas coſas:

2 Yo ſe tus obras, y tu trabajo, ypaciẽcia, y que tu no puedes sufrir los malos, y has prouado à los que ſe dizen ſer apoſtoles, y no lo ſon, y los has hallado mentirosos.

3 Y has sufrido, y suffres, y has trabajado por mi Nombre, y no has desfallecido.

4 Pero tengo algo contra ti, porque has dexado tu primera charidad.

5 Por loqual ten memoria de donde has caydo, y arrepientete, y haz las primeras obras: ſi no vendre presto à ti, y quitaré tu candelero de ſu lugar, ſi no te enmendares.

6 Mas tienes eſto, que aborreçes los hechos de los Nicolaytas, los quales yo tambien aborrezco.

7 El que tiene oreja, oyga loque el Eſpiritu dize à las Iglesias: Alque vẽciêre, daré à comer del arbol de la vida, elqual eſta en medio del Parayso de Dios.

8 Y escriue àl Angel de la Igleſia de Smyrna: El primero y postrero que fué muerto, y biue, dize estas coſas:

9 Yo ſe tus obras, y tu tribulacion, y tu pobreza, (pero tu eres rico) y la blasphemia de los que ſe dizẽ ſer Iudios, y no lo ſon: ſi no Synoga de satanas.

10 No tengas ningun temor de las coſas que has de padecer: Heaqui, el diablo ha de embiar algunos de vosotros à la carçel paraqua seays prouados, y tendreys tribulaciõ de diez dias. Sé fiel haſta la muerte, y yo te daré la corona de la vida.

11 El que tiene oreja, oyga loque el Eſpiritu dize à las Iglesias, Elque venciere, no recebirá daño de la muerte segunda.

12 Y escriue àl Angel de la Igleſia que eſta en Pergamo: El que tiene la espada de dos filos, dize estas coſas:

13 Yo ſe tus obras, y donde moras, dõde eſtá la silla de satanas: y tienes mi Nombre, y no has negado mi fe, aun en los dias enque fué Antipas mi teſtigo fiel, elqual ha sido muerto entre vosotros, donde satanas mora.

14 Pero tengo vnas pocas coſas contra ti: porque tu tienes ay los que tienen la doctrinade Balaam, elqual enseñaua à Balaac, à poner escan dalo delante de los hijos de Iſrael, à comer de coſas sacrificadas à los idolos, y à cometer fornicacion.

15 Ansi tambien tu tienes à los que tienẽ la doctrina de los Nicolaytas, loqual aborrezco.

16 Arrepientete, porque de otra manera vendré à ti presto, y pelearé contra ellos con la espada de mi boca.

17 El que tiene oreja, oyga loque el Eſpiritu dize à las Iglesias: Alque venciere, daré à comer del Manna escondido, y dare le vna pedrezica blanca, y en la pedrezica vn Nombre nueuo eſcripto, el qual ninguno conoce, ſi no aquel que lo recibe.

18 Y escriue àl Angel de la Igleſia que eſtá en Thyatira: El Hijo de Dios que tiene ſus ojos como llama de fuego, y ſus pies ſe mejantes àl laton finiſsimo, dize estas coſas:

19 Yo he conocido tus obras, y charidad y seruicio, y fe, y tu paciencia, y tus obras, y las postrerasque ſonmuchas mas que las primeras.

20 Mas tengo vnas pocas coſas cõtra ti: que permites à Iezabel muger (que ſe dize prophetiſſa) enseñar, yengañar à mis sieruos, à fornicar, y à comer coſas offrecidas à los idolos.

21 Y he le dado tiempo paraque ſe arrepienta de la fornicacion, y no ſe hà arrepẽtido.

22 Heaqui yo la echo en la cama, y à os que adultêran con ella, en muy grande tribulacion, ſi no ſe arrepintieren de ſus obr:

23 Y mataré ſus hijos con muerte, y todas las Iglesias sabrán, que yo ſoyel que escudrîño los riñones, y los coraçones: y daré à cada vno de vosotros ſegun ſus obras.

24 Pero yo digo à vosotros, y à los demas que estays en Thyatira: Qualesquiera que no tienen eſta doctrina, y que no han conocido las profundidades de Satanas (como ellos dizẽ) yo no embiaré ſobre vos otros otra carga.

25 Empero laque teneys, tenelda haſta que yo venga.

26 Y àlque vuiere vencido, y vuiere guardado mis obras haſta la fin, yo le dare potestad ſobre las Gentes:

27 Y las regirá con vara de hierro, y ſeran quebrãtadas como vaſo de ollero, como tambien yo la he recebido de mi Padre:

28 Y darlehé la eſtrella de la mañana.

29 El que tiene oreja, oyga loque el Eſpiritu dize à las Iglesias.

EL APOCALY. DE S. IOAN. 3

1 Y Escriue àl Angel de la Igleſia que eſtá en Sardo: El que tiene los ſiete Espiritus de Dios, y las ſiete eſtrellas, dize estas coſas: Yo conozco tus obras: que tienes nombre que biues, y estás muerto.

2 Se vigilante, y confirma las otras coſas que eſtauan para morir: porque no hé hallado tus obras perfectas delante de Dios.

3 Acuerdate pues de loque has recebido, y has oydo: y guardalo, y arrepientete. Y ſi no veláres, vendre a ticomo ladron, y no sabrás à que hora vendre à ti.

4 Mas tienes vnas pocas perſonas tambien en Sardo, que no han ensuziado ſus vestiduras, y andarán conmigo en vestiduras blancas pot que ſon dignos.

5 El que venciere, ſerá anſi veſtido de vestiduras blãcas: y no borraré ſu nombredel libro de la vida, y confeſſaré ſu nombre delante de mi Padre, y delante de ſus Angeles.

6 El que tiene oreja, oyga loque el Eſpiritu dize à las Iglesias.

7 Y escriue àl Angel de la Igleſia que eſtá en Philadelphia: El Sancto y Verdadero,que tiene la llaue de Dauid: que abre, y ninguno cierra: que cierra, y ninguno abre, dize estas coſas:

8 Yo conozco tus obras: heaqui te he dado la puerta abierta delante de ti, y ninguno la puede cerrar: porque tu tienes vna poquita de potencia, y has guardado mi Palabra, y no has negado mi Nombre.

9 Heaqui, yo doy de la Synoga de Satanas, los que ſe dizẽ ſer ludios, y no lo ſon, mas mienten: heaqui, yo los constreñiré à que vengan, y adoren delante de tus pies, y sepan que yo te he amado.

10 Porquehas guardado la Palabra de mi paciencia, y yo te guardaré de la hora de la tentacion, que hà de venir en todo el vniuerso mundo para prouar losque morã en la tierra.

11 Cata, que yo vengo presto: ten lo que tienes. paraque ninguno tome tu corona.

12 Alque venciere, yo lo haré coluna en el templo de mi Dios, y nunca mas ſaldrá fuera: y escreuiré ſobre el el Nombre de mi Dios, y el nombre de la Ciudad de mi Dios, que es la nueua Hieruſalem, laqual ha decendido del cielo de con mi Dios, y mi Nombre nueuo.

13 El que tiene oreja, oyga loque e Espũ dize a las Iglesias.

14 Y escriue àl Angel de la Igleſia de los Laodicenses: Heaqui, el que dize Amen. el teſtigo fiel y verdadero,el principio de la criatura de Dios:

15 Yo conozco tus obras: que ni eres frio, ni caliente. Oxala fueſſes frio, ò hiruiente.

16 Mas porque eres tibio, y no frio ni hiruiente, yo te vomitaré de mi boca.

17 Porque tu dizes: Yo ſoy rico, y ſoy erriquecido, y no tengo neceſsidadde ninguna coſa: Y no conoces que tu eres cuytado y miserable, pobre, y ciego, y desnudo.

18 Yo te amonesto que de mi cõpres oro affinado en fuego, paraque seas hecho rico, y seas veſtido de vestiduras blãcas, paraque no ſe descubra la verguença de tu desnudez: Y vnge tus ojos con colyrio, paraque veas.

19 Yo reprehẽdo y castigo à todos los que amo: ſe pues zeloso, y enmiendate.

20 Cata, que yo estoy parado à la puerta, y llamo: ſi algnno oyere mi boz, y me abriere la puerta entraré à el, y cenare con el, y el conmigo.

21 Alque veciere, yo le daré que ſe assiẽte conmigo en mi Throno: anſi como yo he vencido, y me he aſſentado con mi Padre en ſu Throno.

22 El que tiene oreja, oyga loque el Eſpiritu dize à las Iglesias.